Realmente lo necesito?

Será que todo lo que compramos son cosas que realmente necesitábamos? la fuerza que la publicidad ejerce sobre nosotros es increíble al punto que después de ver varios afiches el mismo día sobre un producto del cual ni sabíamos s existencia, terminamos comprándolo.

Si hacemos una limpieza general de nuestras casas y dejamos solo las cosas que realmente necesitamos, seguramente nos sorprendería ver la cantidad de cosas de la que nos tendríamos que deshacer.

Como es que hemos llegado a acumular todo eso?, la respuesta es fácil, eso ha pasado por el continuo bombardeo de publicidad que ha llegado hasta convertirse en un status social.

No tenemos el mejor celular porque nos es completamente necesario, ni por qué nos sobre el dinero ya que usualmente vendemos el anterior y andamos como locos tratando de ajustar el dinero para el nuevo, pero ya no es solo porque lo hemos visto tantas veces en la tele que lo tenemos siempre presente, sino que tenerlo significa que somos gente actual.

Salir de nuestras casas es lidiar con cientos de vallas y anuncios en el camino, listos para tentarnos, ni se diga de la comida, cuyos anuncios hacen babear a mas de una persona.

Basta saber que es un enganche para librarnos de él? Todos sabemos que podemos vivir perfectamente bien sin el ipad nuevo o comer todos los días comidas rápidas pero el bombardeo de publicidad hace casi imposible sacarnos de la cabeza estos productos, y sin importar que, seguimos comprándolos.

Después de razonar esto, se cuela la idea que una de las mejores armas del hombre, no está hecha de madera, es nuestro simple subconsciente y hay muchos que saben exactamente como atacarlo, por ello dudo mucho que dejemos de lado la idea de comer ese combo que acabamos de ver en el cartel y seguramente estamos viendo nuestro celular y pensamos cuanto nos darán por él?.